La tristeza me mira con mi rostro, y me devuelve la sonrisa rota.

Cajita de música una y otra vez con la misma canción.

No soporto más

No me gusta sentir tanto.

Caparazón de piedra ¿Donde estás?

Es mi epoca de llorar, de llorar con sentido, con mucho sentido, y a veces con muy poco. Tengo tanto sentimiento aqui dentro que me quiebro, que siento que giro en un espiral sin sentido, o con un sentido tan definido que tengo miedo, por que nunca me preocupé por nadie más, por una extension que ahora existe y crece en mi, la pregunta, es: ¿Podré?, la respuesta es un simple: Tengo que.

Nunca pensé que vivir en casa seria alguna vez desagradable, miento, si lo pensé y varias veces, pero podia continuar porque no frecuentaba la casa mas que para dormir.
Me puse a llorar unas cuantas veces y la ultima vez por mucho tiempo, tanto que me dormí. La conclusion al dia siguiente era que la vida era jodida y mas cuando te piensas fuera del utero, sin trabajo, sin dinero, solo con la ropa que tienes y unos cuantos libros que te alimentarian por una semana si es que la señora del baratillo te los quiere comprar a buen precio.
Me deprimo y pido un abrazo de Moises, pero a veces eso no basta, el mundo es más que abrazos y amor, el mundo es una boca grande, profunda y negra, negrisima.